sábado, 24 de noviembre de 2007

El secreto del Merengón!!!!


El secreto del Merengón!!!!





En la cultura colombiana existen diferentes tipos de manjares que nos deleitan en las salidas familiares cada domingo, el merengón es el que marcó mi vida. Este postre autóctono de nuestro pais se ha convertido a lo largo de los ultimos veinte años en un icono en las calles, avenidas y autopistas colombianas, y tiene ciertas caracteristicas que lo hacen facil de identificar en el espacio público o mejor dicho hacen facil identificar su punto de venta, este se nota a simple vista por ser un vehiculo, pero no cualquier vehiculo, es obligatorio que este automotor sea de marca Renault y debe haber sido ensamblado en la decada de los gloriosos 80's; hago referencia al Renault 4, 6, 12 y 18 que son los que caracterizan esta generación de geniales diseños y creaciones francesas en nuestro país.



El punto de venta o sea el carro, se reconoce o esta identificado por tener unos pendones de peculiar color (Anaranjado o verde florente), gran tamaño y ubicados en los sectores laterales del vehiculo y anterior delantero, con letras blancas, negras y rojas que referencian en su contenido el nombre del producto, MERENGÓN!, y es obvio el porque de este atentado a la estética urbana, el que no muestra, no vende.


El merengón originalmente es un triturado de frutas con crema de leche, condensada y arequipe que estan servidos en medio de dos merengues de gran tamaño que son los que le dan el nombre al postre; pero todo esto ha cambiado. Hoy en día el merengón es una cosa totalmente diferente al original, es un postre hecho en un molde, con linesa perfectas y diminutas de arequipe, cremas y fruta en medio de una base de merengue simplón; pero a pesar de parecer tan simple tiene un ingrediente que va al final del proceso, si! Señor lector, el merengón tiene uningrediente mas, y me jacto de decir que yo! Lo he descubierto, la adición de este ingrediente se la proporciona el hecho de que el Renault en el que se vende este manjar permanece con la puerta posterior abierta, para no alargar el asuntoles doy la primicia, el merengón callejero que compramos cada domingo tiene un ingrediente fundamental que le da ese gusto enviciante que enloquece y endulza nuestros paseos, el maravilloso SMOKE!!!!




J. Leonardo Gaitán G.
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El secreto del merengón by Leonardo Gaitan is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-No comercial-Sin obras derivadas 2.5 Colombia License.

jueves, 27 de septiembre de 2007




Adolescentes, Fresitas?



Denominar fresitas a un grupo de personas seguramente no está bien, e incluso, no se debe etiquetar a nadie por ningún motivo, palabras de la abuela, pero en este caso simplemente lo vamos a hacer para facilitar y agilizar la conexión suya señor lector con el tema en cuestión. Estamos en los comienzos del siglo XXI y esta es una epoca de apariencias y falsedades, eso es una realidad de la que los adolescentes no se escapan, y se les convierten en tentaciones, siendo estas tan vanas como decir que aquel que tiene ropa de mejor marca es mejor gente que los demás, que el que mas toma en la rumba es el putas, y que la que se lo da a todos es una bacana, incluso hacer estas cosas y pretender ser asi es denominado dentro de la falsa sociedad ser play o estar a la moda, pero si nos ponemos a pensar en un ejemplo, una simple suposición alejada por completo de la realidad en la que cualquier parecido con esta sea pura coincidencia vamos a hablar de una ciudad de fantasia llamada Bogotá, reitero solamente es un modelo usado en este escrito cual maniquí en sastrería. Dejando en claro esto quisiera contextualizarlo a usted señor lector con este tipo de individuo, y creame, que no le será difícil entender a lo que me refiero en las siguientes lineas y sé que al igual que yo sentirá que nos han invadido, y digo “nos han” porque me excluyo atrevidamente y con el permiso de estos jóvenes me aventuro a revelar que he tenido una educación medianamente buena que me impide seguir los lineamientos de una corriente tan vacia en su misma esencia como la de estos mortales.
Detectar quien es un fresita es relativamente facil, pues estos sujetos jamas entenderan el significado de o , y no lo digo porque sí, ni sin argumentos, y esto es de facil comprobación si usted lo desea, entonces deberá seguir los siguientes pasos: Vistase con algo decente para salir a tomar algo, tome un taxi, bus, bicicleta, camine o movilícese siguiendo sus preferencias a un lugar de mediana concurrencia, sientese y despeje su mente, concentrece, piense en absolutamente nada y cuando oiga una una voz que dice algo como: “¡Marica, del putas sus tenis ¿Cuánto le costaron?!”, en ese momento gire su cabeza hacia el epicentro del sonido y ¡Eureka! Ha encontrado el baúl del tesoro, y escribo baúl porque generalmente son asi , bonitos por fuera y huecos por dentro, señor lector, encontró un fresita.
En la universidad, en la mayoria de los casos un fresita estudia en una universidad con las siguientes caracteristicas: una universidad privada de buena reputación, es decir, una universidad con niñas lindas, gente bien, y buenos tomaderos, adicional de todos estos beneficios, tiene un buen nivel academico a quien interese, esta universidad esta ubicada en un ciudad pintoresca sacada de un cuento de fantasia llamada Bogotá, es obligación que nuestro personaje sea ex alumno de un colegio con similares caracteristicas, de lo contrario no podrá adaptarse en su nuevo habitat y seguramente no será un fresita realizado y tendra el placer de ser una persona normal. Llamaré un ejemplo a texto y esto podrá parecer el relato de la historia de un circo sin pretender serlo y de antemano me disculpo por esto, dia lunes semana de inducción, Alejo (un habitante de fantasia de Bogotá) se para de su puesto por petición del inductor asignado, y se presenta, salió al ruedo universitario de la manera que mejor sabe, seguramente la unica, “Me llamo Alejo, vivo en X barrio estrato 6 y salí de Y colegio a la salida de Bogotá, mi papá es gerente de un multinacional y mi mamá se dedica al club y a las cartas con sus amigas” casualmente y muy de buenas este señor, pero la alarma de un carro se activó y obviamente él tiene que asomarse a ver si es su carro para que de paso sepan sus ahora compañeros que el joven anda sobre ruedas y convertir el tema automotor en el principal de conversación, ademas de buscar ganar unos puntos con el sexo opuesto, aclaro que no son unicamente los hombres quienes hacen esto, pues a las mujeres no les es nada difícil mostrar lo que se tiene y saberlo utilizar.
En la rumba, esto es un espectáculo bochornoso por donde lo vea y desde el primer momento, en la entrada un individuo de estos pretende ser el mas amigo del señor de la entrada diciendole “¿que mas güevon, como vas?” con la ilusión de hacerlo sentir importante y de esta manera entrar con su parche pasando el filtro mas jodido de la ciudad, pero no, eso no es asi, y por esta razon la parte del bar donde mas fresitas encuentra es en la de afuera del bar, ese es el grupo de los que andan solos, sin viejas y no pasan filtro alguno por ser obvio que van de levante, para estos jóvenes el plan b siempre existe y se hace realidad, porque saben que la idea original no se va a lograr y entonces siempre su segunda opcion termina siendo la primera o en algunos casos la única. Por otro lado estan los que entran al establecimiento pensado, todo perfecto hasta que beben los primeros tragos, si, lastimosamente el señor del filtro no es perfecto, mago, ni mucho menos, es humano y de humanos es equivocarse, porque con unos tragos meten la pata con toda este tipo de personas, y pues contra eso no se puede hacer nada, son de un peculiar actuar en estado de embriaguez asi sea leve, quieren bailar con la o el que no deben, buscan peleas sin numero, y son finalmente sacados por la sencilla razón de ser unos niños escandalosos.

Con seguridad ya quedó claro quien es nuestro ente en reflexión y ya ubicado en algunos contextos de usual estar expreso logré sosegar mi cólera contra este. Que parece ser en dias contemporáneos un roedor de la juventud que no pretende nada mas que acabar con esta y con sigo mismo.



J. Leonardo Gaitán Guerra
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